Las hierbas frescas en la cocina.

Las hierbas frescas son un ingrediente versátil y saludable que puede transformar tus platos cotidianos en auténticas delicias culinarias. Aquí te ofrecemos algunos consejos sobre cómo aprovechar al máximo las hierbas frescas en tu cocina:

Cómo Utilizar las Hierbas Frescas para Dar un Toque Especial a Tus Platos

Albahaca

Uso en Platos: Ideal para ensaladas, pastas y salsas, especialmente el pesto.
Pesto Casero: Mezcla albahaca fresca, ajo, piñones, queso parmesano y aceite de oliva en una licuadora para crear un pesto delicioso que puedes usar en pastas, sándwiches o como aderezo para ensaladas.
Ensaladas Frescas: Añade hojas de albahaca fresca a tus ensaladas de tomate y mozzarella para un toque aromático y refrescante, realzando el sabor de los ingredientes frescos.
Salsas y Sopas: Incorpora albahaca al final de la cocción en salsas de tomate y sopas para mantener su sabor vibrante y fresco, dando un toque mediterráneo a tus platos.
Consejo: Añádela al final de la cocción para mantener su sabor fresco y vibrante.

Perejil

Uso en Platos: Perfecto para guisos, ensaladas, y como adorno en casi cualquier plato.
Gremolata: Mezcla perejil fresco picado, ajo y ralladura de limón para crear una gremolata, una guarnición que añade un toque fresco y cítrico a platos de carne, pescado o verduras asadas.
Salsas y Marinadas: Incorpora perejil picado en salsas y marinadas para darles un sabor fresco y herbal. Es especialmente bueno en salsas verdes como la salsa chimichurri para carnes a la parrilla.
Guarnición Versátil: Utiliza perejil fresco picado como guarnición para casi cualquier plato, desde sopas y guisos hasta ensaladas y pastas, para añadir color y un toque de frescura.
Consejo: Mezcla perejil picado con ajo y aceite de oliva para hacer una salsa rápida y sabrosa.

Cilantro

Uso en Platos: Excelente en salsas, tacos, y platos asiáticos.
Salsas y Guacamoles: Añade cilantro fresco picado a salsas y guacamoles para aportar un sabor fresco y cítrico, perfecto para acompañar tacos, nachos y otros platos mexicanos.
Platos Asiáticos: Incorpora cilantro a platos asiáticos como currys, ensaladas y sopas para darles un toque aromático y fresco, equilibrando sabores picantes y salados.
Ensaladas y Marinadas: Mezcla cilantro con aceite de oliva, jugo de limón y especias para crear aderezos de ensaladas y marinadas que realzan el sabor de carnes, pescados y verduras.
Consejo: Úsalo fresco y en crudo para mantener su sabor cítrico y fresco.

Romero

Uso en Platos: Ideal para carnes, especialmente cordero y pollo, así como en patatas asadas.
Carne Asada: Usa ramas de romero fresco para aromatizar carnes asadas, especialmente cordero y pollo. Inserta las ramas en la carne o colócalas sobre las brasas para impartir su aroma.
Aceites Infusionados: Infusiona aceite de oliva con romero para crear un aceite aromático perfecto para aderezar ensaladas, rociar sobre pizzas o acompañar pan recién horneado.
Patatas Asadas: Añade romero fresco a las patatas antes de asarlas en el horno. El romero le dará un sabor aromático y terroso, complementando la textura crujiente de las papas.
Consejo: Infunde aceites y mantequillas con romero para un toque extra de sabor.

Tomillo

Uso en Platos: Funciona bien en guisos, sopas y marinadas.
Guisos y Estofados: Incorpora ramitas de tomillo fresco al principio de la cocción en guisos y estofados. Su sabor terroso y ligeramente mentolado se infunde lentamente, realzando el sabor de carnes y verduras.
Sopas y Caldos: Añade tomillo fresco a sopas y caldos para un toque aromático. Es especialmente bueno en sopas de pollo y caldos de verduras, aportando profundidad y complejidad al sabor.
Mantequilla de Tomillo: Mezcla tomillo fresco picado con mantequilla ablandada para crear una mantequilla compuesta que puedes usar para untar en pan, derretir sobre filetes o mezclar en puré de papas.
Consejo: Agrégalo al principio de la cocción para que su sabor se distribuya uniformemente.

Menta

Uso en Platos: Perfecta para ensaladas, bebidas y postres.
Ensaladas Frescas: Añade hojas de menta fresca a ensaladas de frutas o verduras para un toque refrescante y aromático. Combina especialmente bien con sandía, pepino y queso feta.
Bebidas y Cócteles: Utiliza menta fresca en bebidas como mojitos, limonadas y tés helados para aportar un sabor refrescante y revitalizante.
Postres y Salsas: Incorpora menta picada en postres como helados, tartas y mousse de chocolate. También puedes hacer una salsa de menta para acompañar carnes como el cordero.
Consejo: Mezcla menta picada con frutas frescas para una ensalada de frutas refrescante.

Eneldo

Uso en Platos: Excelente con pescados, en salsas y ensaladas de patata.
Salmón y Pescados: Espolvorea eneldo fresco sobre filetes de salmón y otros pescados antes de hornearlos o asarlos. El eneldo aporta un sabor fresco y ligeramente anisado que complementa perfectamente los mariscos.
Salsas y Aderezos: Mezcla eneldo fresco picado con yogur, crema agria o mayonesa para crear salsas y aderezos deliciosos. Es ideal para acompañar ensaladas, vegetales y platos de pescado.
Encurtidos: Añade eneldo fresco a la salmuera cuando prepares encurtidos caseros. Su sabor distintivo y aromático mejora pepinillos, zanahorias y otros vegetales encurtidos.
Consejo: Úsalo en yogur con ajo para una salsa tzatziki casera.

Estragón

Uso en Platos: Ideal para platos de pollo, huevos y en vinagretas.
Pollo al Estragón: Cocina pechugas de pollo con estragón fresco, vino blanco y crema para crear un plato clásico francés. El estragón aporta un sabor suave y ligeramente anisado que realza la carne blanca.
Vinagretas y Aderezos: Incorpora estragón picado en vinagretas y aderezos para ensaladas. Su sabor distintivo añade un toque especial a cualquier mezcla de hojas verdes y vegetales.
Huevos y Salsas: Añade estragón a salsas como la salsa bearnesa y platos de huevo como omelets y quiches. El estragón aporta un sabor único que combina bien con los ingredientes cremosos y suaves.
Consejo: Añádelo a una salsa de crema para darle un toque sofisticado.

Cultiva tus Propias Hierbas

Consejo Adicional: Considera cultivar tus propias hierbas en casa. No necesitas un gran espacio; incluso una ventana soleada puede ser suficiente para un pequeño jardín de hierbas.
Elegir el Lugar Adecuado: Planta tus hierbas en un lugar soleado, preferiblemente donde reciban al menos 6 horas de luz solar al día, como una ventana orientada al sur o un balcón.
Riego y Drenaje: Asegúrate de que las macetas tengan buen drenaje y riega las hierbas regularmente, manteniendo el suelo húmedo pero no encharcado, para evitar la pudrición de las raíces.
Cosecha Frecuente: Recorta las hierbas con regularidad para fomentar un crecimiento denso y saludable. Usa tijeras limpias y corta justo por encima de un nodo o conjunto de hojas.

Almacenamiento y Cuidado

Refrigeración: Envuelve las hierbas frescas en un papel de cocina húmedo y colócalas en una bolsa de plástico perforada en el refrigerador. Esto ayuda a mantener la humedad y prolongar su frescura.
Congelación: Lava y seca bien las hierbas, pica finamente y colócalas en bandejas para cubitos de hielo con un poco de agua o aceite de oliva. Una vez congeladas, transfiérelas a bolsas de congelador para usarlas cuando las necesites.
Almacenamiento en Agua: Para hierbas con tallos suaves, como el cilantro y el perejil, coloca los tallos en un vaso de agua como si fueran flores y cúbrelos ligeramente con una bolsa de plástico. Cambia el agua cada pocos días para mantenerlas frescas.
Secado: Si tienes más hierbas de las que puedes usar frescas, considera secarlas colgándolas boca abajo en un lugar fresco y seco.

Las hierbas frescas no solo mejoran el sabor de tus comidas, sino que también aportan nutrientes y beneficios para la salud. ¡Experimenta con diferentes combinaciones y descubre cómo estos pequeños ingredientes pueden hacer una gran diferencia en tus platos!