Mermelada de higos casera.

Preparación (método tradicional):

1. Lava bien los higos y córtalos en cuartos. No es necesario pelarlos, ya que la cáscara se ablandará durante la cocción.
2. En una olla grande, coloca los higos cortados, el azúcar, el jugo y la ralladura del limón, la rama de canela y el agua. Mezcla bien para que el azúcar comience a disolverse.
3. Lleva la mezcla a fuego medio hasta que comience a hervir. Una vez que hierva, reduce el fuego a bajo y cocina a fuego lento durante 1 hora, removiendo ocasionalmente para evitar que se pegue al fondo de la olla.
4. Durante la cocción, retira la espuma que se forme en la superficie con una cuchara para obtener una mermelada más clara y de mejor textura.
5. Pasada la hora, verifica la consistencia de la mermelada. Debe estar espesa y los higos completamente deshechos. Si deseas una textura más suave, puedes triturar la mezcla con una batidora de mano.
6. Mientras la mermelada aún esté caliente, viértela en frascos de vidrio previamente esterilizados. Llena cada frasco hasta el borde y ciérralos bien.
7. Deja que los frascos se enfríen a temperatura ambiente y luego guárdalos en un lugar fresco y oscuro. Una vez abiertos, conserva la mermelada en el refrigerador.

Preparación (con Thermomix):

1. Lava bien los higos y córtalos en cuartos.
2. Coloca los higos en el vaso de la Thermomix junto con el azúcar, el jugo y la ralladura del limón, la rama de canela (si la usas) y el agua.
3. Tritura a velocidad 5 durante 10 segundos, o hasta que obtengas la textura deseada. Si prefieres una mermelada con trozos, reduce el tiempo de trituración.
4. Cocina la mezcla programando 30 minutos, 100°C, velocidad 1. Coloca el cestillo sobre la tapa en lugar del cubilete para permitir la evaporación.
5. Si al finalizar el tiempo la mermelada está demasiado líquida, programa 10 minutos más a temperatura Varoma, velocidad 1, sin cubilete para que espese.
6. Vierte la mermelada caliente en frascos de vidrio esterilizados, ciérralos bien y déjalos enfriar a temperatura ambiente.
7. Guarda los frascos en un lugar fresco y oscuro. Una vez abiertos, conserva la mermelada en el refrigerador.

Consejo adicional:

• Para darle un toque aún más especial a tu mermelada de higos, puedes agregar una pequeña cantidad de jengibre fresco rallado o una pizca de vainilla durante la cocción. Esto realzará los sabores y le dará un matiz único que sorprenderá a quienes la prueben. Además, asegúrate de esterilizar bien los frascos antes de envasar la mermelada para garantizar su conservación y evitar que se estropee.