El arroz es un alimento versátil y delicioso que puede prepararse de muchas formas, destacándose las variantes de arroz seco y arroz caldoso.
Arroz Seco: Textura: El arroz seco, como en una paella o arroz al horno, tiene una textura suelta y graneada. Cada grano se cocina de manera que queda separado y ligeramente firme.
Sabores Intensos: Al ser cocido con menos líquido, los sabores de los ingredientes se concentran más, ofreciendo una experiencia de sabor intensa y definida.
Arroz Caldoso: Consistencia: El arroz caldoso, como en un risotto o arroz con bogavante, tiene una consistencia más líquida o cremosa, similar a una sopa espesa.
Profundidad de Sabor: Los caldos bien elaborados, hechos con huesos, mariscos, o vegetales, aportan una profundidad de sabor que se transmite al arroz.