Ensaladilla con Langostinos: Sabores del Marisco

Este plato es una deliciosa variante de la clásica ensaladilla, donde los sabores del marisco se fusionan con la suavidad de las patatas y el contraste de los pimientos de piquillo. La presentación, coronada con langostinos y tiras de pimientos, aporta un toque colorido y elegante a la mesa, convirtiendo un plato sencillo en una verdadera maravilla culinaria.

Ingredientes:

4 patatas medianas
150 g de guisantes
200 g de langostinos cocidos
6 pimientos del piquillo
3 huevos
200 g de mayonesa
Sal al gusto

Elaboración:

Preparar los ingredientes:
- Lava las patatas.
- En una cacerola grande, coloca las patatas enteras y con piel. Cubre con agua y añade una pizca de sal. Lleva a ebullición y cocina hasta que las patatas estén tiernas, aproximadamente 15-20 minutos. Pínchalas antes de sacarlas para comprobar que están tiernas.
Cocinar los huevos:
- En una cacerola aparte, hierve los huevos durante 10 minutos. Una vez cocidos, enfríalos en agua fría, pélalos y pícalos en trozos pequeños.
Enfriar y mezclar:
- Escurre las patatas cocidas. Deja enfriar a temperatura ambiente. Pártelas en trozos pequeños.
- En un bol grande, mezcla las patatas y los huevos picados. Añade la mayonesa y mezcla bien hasta que ambos ingredientes estén bien integrados. Ajusta la sal al gusto.
Agregar los langostinos:
- Reserva algunos langostinos para la decoración y pica el resto en trozos pequeños. Incorpora los langostinos picados a la ensaladilla y mezcla suavemente.
Montaje y decoración:
- Transfiere la ensaladilla a una fuente o plato de presentación.
- Cubre con una capa fina de mayonesa.
- Decora la superficie de la ensaladilla con los langostinos enteros que reservaste y con tiras de pimientos del piquillo, colocándolos en forma de abanico o según tu preferencia.
Refrigerar y servir:
- Lleva la ensaladilla al refrigerador y deja enfriar durante al menos 1 hora (lo ideal serían 2 o 3 horas) antes de servir para que los sabores se integren mejor.
- Sirve la ensaladilla fría, como entrante o acompañante de otros platos.

Este plato, aunque sencillo, destaca por su frescura y la perfecta combinación de sabores y texturas, haciendo que sea una opción deliciosa y versátil para cualquier comida. ¡Bon appétit!